1.1 Principales
características de un eco-hotel
Entre las características más importantes que debe tener un eco hotel se
encuentra que dentro de sus
instalaciones sólo el 20% de la superficie debe ser construcción y el 30% del
total de la propiedad debe ser vegetación originaria de la zona, conservando
con esto la biodiversidad de la región. Las
instalaciones deben de estar diseñadas para reducir al máximo el impacto
ambiental, conservando el paisaje natural de la región y utilizando materiales
naturales de la zona.
“Se considera, pues, una nueva apuesta por el desarrollo sostenible en
la construcción de hoteles, donde se tiene en cuenta el entorno y el
aprovechamiento de los recursos disponibles (sol, vegetación, lluvia, vientos)
para lograr que los consumos de energía para refrigeración, calefacción y agua
sean mínimos”(1).
Ecohoteles:
Una Apuesta De Sostenibilidad Para El Siglo Xxi. (2010). Recuperado
el 12 de noviembre de 2013, de
http://www2.fe.ccoo.es/andalucia/docu/p5sd7349.pdf
Las medidas anteriores aseguran que casi la totalidad del
establecimiento aproveche diversos recursos, evitando así la contaminación por
los procesos de construcción convencionales. Además, busca la protección de
especies endémicas del sitio donde está ubicado el hotel. Por otra parte, ambos
aspectos promueven el contacto de los huéspedes con la naturaleza, haciendo de
la experiencia algo diferente.
De acuerdo con lo investigado por Laura
Blanco, “para ser considerado ecológico, un hotel debe cumplir con ciertos
parámetros relacionados con la emisión de dióxido de carbono, el consumo de agua y
el cuidado del ecosistema”.
Blanco, L. Eco-hoteles,
más que una moda. (2013). Recuperado
el 12 de noviembre de 2013, de http://turismo.perfil.com/23159-eco-hoteles/
Con esto comprobamos que las regulaciones para estos establecimientos
van más allá de la construcción y también se preocupan por aspectos tan
importantes como el control de emisiones. Diversas industrias buscan ofrecer
opciones para ello, como la automovilística, pero pocas son tan exitosas como
la hotelera. Conseguir que un hotel funcione con menos consumo de combustible
es algo viable y relativamente sencillo usando, por ejemplo, energía solar,
eólica o hidráulica. “Los hoteles ecológicos se caracterizan por utilizar
sistemas de energía alternativa, como paneles
solares, que no producen ningún tipo de contaminación ambiental”.
Blanco, L. Eco-hoteles,
más que una moda. (2013). Recuperado
el 12 de noviembre de 2013, de http://turismo.perfil.com/23159-eco-hoteles/
Por otra parte, deben contar con un sistema que conserve el agua limpia,
así como de ahorro, tratamiento de aguas negras y aprovechamiento. “(...)
realizan una división de aguas grises (reutilizadas para el riego) y negras
(tratadas en cámaras sépticas)”.
Blanco, L. Eco-hoteles,
más que una moda. (2013). Recuperado
el 12 de noviembre de 2013, de http://turismo.perfil.com/23159-eco-hoteles/
En el manejo diario del establecimiento también se toman en cuenta
pequeñas medidas de ecología como lo son utilizar productos biodegradables para
la limpieza y lámparas ahorradoras,
además de separar los residuos.
“La
cultura ecológica de un establecimiento hotelero pasa por el respeto a las
tradiciones y cultura local, el paisaje rural o natural de la zona y la
biodiversidad del entorno. Por tanto, el desarrollo y la participación de la
comunidad local se hace imprescindible, al fomentar una cultura de no agresión
al medio ambiente”(4). La presencia de un eco-hotel en una localidad debe
respetar las costumbres y especies del lugar, pero además debe apoyar a
programas e instituciones allí establecidos. Con esto, además de beneficiar al
negocio y a los clientes, se ayuda a la comunidad.
Ecohoteles:
Una Apuesta De Sostenibilidad Para El Siglo Xxi. (2010). Recuperado
el 12 de noviembre de 2013, de
http://www2.fe.ccoo.es/andalucia/docu/p5sd7349.pdf
1.2 Posibles desventajas
Algunas
posturas sostienen que los eco-hoteles en realidad no representan una ayuda al
medio ambiente y que sólo buscan lucrar con una tendencia. Si bien es probable
que esto suceda en muchos casos, también hay otros tantos, ejemplos de
eco-hoteles exitosos que prueban lo contrario.
Otro
argumento en contra es la austeridad que algunos de estos establecimientos
manejan. Dado que parte de sus principios es no excederse en construcción,
algunos eco-hoteles tienen una presentación más sencilla, pero ello no es
prueba de que el servicio sea de baja calidad.
El
Adrére Amellal es uno de los mejores ejemplos. Está ubicado cerca de la
frontera entre Libia y Egipto y su construcción es únicamente de rocas y
arcilla. Además, no cuenta con
electricidad. No se trata de una opción
barata, pero sus servicios están calificados entre los más altos del mundo,
demostrando que ecología y calidad pueden ir de la mano.